Fuerte lluvia desborda presas y convierte en ríos las calles de Guanajuato

Vía Observatorio Informativo
Guanajuato.- Fuerte aguacero con duración de aproximadamente dos horas ocasionó que el agua de la muy pequeña presa de San Renovato se brincara a la presa de La Olla y que las compuertas de esta fueran abiertas controladamente para evitar su desbordamiento.
Asimismo –al igual que sucede cada vez que llueve muy fuerte- la calle subterránea Miguel Hidalgo temporalmente se convirtió en arroyo y gran cantidad de callejones en efímeras cascadas.
José Salmones, coordinador de comunicación social del municipio, informó que el chaparrón se registró de las cinco y media o seis de la tarde hasta casi las ocho de la noche, y hasta las 22.00 horas no había reportes de víctimas ni de daños a inmuebles, pero sí de vehículos que al estar estacionados en la subterránea fueron arrastrados por la corriente.
“Afortunadamente Chava, no tenemos ahorita, hasta el momento, ninguna pérdida qué lamentar, no tenemos pérdidas ni daños materiales fuertes que lamentar, insisto, hasta el momento de este reporte. Quiero decirles que nuestra presidenta municipal, la alcaldesa Samantha Smith ha estado de manera permanente vigilando ahí en la zona del C4, en el área de monitoreo que tiene seguridad ciudadana, ha estado monitoreando, ha estado en contacto permanente con todas las áreas operativas”.
Elementos de todas las áreas de seguridad pública, así como de protección civil, del Sistema Municipal de Agua Potable y de los dos cuerpos de bomberos, participaron en trabajos para limpiar alcantarillas y atender reportes de ayuda que se presentaran
“Porque, hemos de decirlo, lamentablemente, nos falta mucho en manera de educación civil, de apoyarnos de manera civil y no tirar basura, porque hay que recordar que la ciudad de Guanajuato, por su constitución es una cañada y toda la basura, todo el material pétreo, todo lo que se encuentra en los callejones, evidentemente por la gravedad del agua van a dar a los sitios más bajos de la ciudad, ocasionando estos taponamientos y que colapse el sistema de drenaje pluvial”.
En la parte baja de la zona del Jardín de la Unión el agua en la calle subterránea alcanzó los 60 centímetros de altura.
“Las compuertas de la presa de La Olla están de manera permanente abiertas para evitar que se desborde, recordemos que es una parte alta de la ciudad y toda esa agua va a dar directamente a la calle Sangre de Cristo, hasta el centro, pudiendo afectar aún más a la ciudadanía”.
La historia contada desde hace muchos años volvió a repetirse una vez más: así como de rápido llegó el agua, así se fue.